Reinterprétate. Quico Miró

Reinterprétate es el título de la obra que Quico Miró presentará el próximo 26 de Octubre en el Teatro Río de Ibi. Un espectáculo, de casi dos horas de duración, en el que el músico ha reunido a un buen número de artistas llegados desde distintas disciplinas como la fotografía, la danza o el grafismo, con un único criterio unificador, dejarse llevar por la música, hacer con ella un ejercicio de reinterpretación.

El de la música es un lenguaje con el que se le transmite y se le ganan sensaciones al público, pero, en este juego, Quico ha querido establecer también una comunicación visual. María Reig es la autora de las casi trescientas imágenes que se irán proyectando al tiempo que suenan los violines, el contrabajo y el piano. Su música será sincronizar esas imágenes con la de los instrumentos que están sonando en tiempo real. Un todo directo.

Quico Miró ha decidido dar el paso a la composición. Quien crea, lo hace sujeto a sus experiencias y a sus vivencias. Pocos secretos son más públicos y menos accesibles que este. En los doce microrelatos músico-visuales que componen el espectáculo, el autor decide mostrarse al público a través de su música. Aunque entre Quico y María hay sonrisas cómplices que dicen sin decirlo que aquí hay algo más que música, fotografía o danza, este espectáculo es un ejercicio de vida.

“¡Juega, construye, reflexiona, habla, escribe!” Así comienza el autor las notas al programa de su espectáculo. Y parece que Quico ha conseguido hacer llegar este mensaje a todos los que le han seguido en este proyecto.

En un proceso en el que ha imperado la libertad creativa, María es quien decide pedirle a Miguel Ramal participar en el proyecto firmando el cartel. “Me estalló la cabeza al verlo”, admite María. Sin lugar a dudas, un buen indicativo de que se nos viene algo bueno es la forma de presentarse. Él es el que en esta conversación nos da una de las claves del espectáculo cuando comenzamos a hablar sobre dónde reside el equilibrio de la obra. Y es que, en todo este collage, el equilibrio lo da cada uno de los que lo componen. Un mismo objetivo común, una directriz clara: reinterpretar, reinterpretarse.

Pregunta. Reinterprétate es un concierto en doce actos, pero también es un espectáculo en el que convergen música, fotografía y danza. ¿Por qué decidiste inclinarte por este formato?

Quico Miró. Actos, obras, números, piezas… Yo decidí llamarlos microrrelatos porque en cada uno de ellos contaba una historia breve y diferente. Simplemente decidí inclinarme por combinar estas artes para que el mensaje llegara mucho más directo al público.

P. Siempre es difícil hablar de tiempos pero, ¿cuánto hace que llevabas madurando la idea? ¿Y, cuánto tiempo más ha hecho falta para materializarla?

Q.M. ¿Qué idea? ¿La de sentarme a componer? Llevaba mucho tiempo con ganas de experimentar con la composición musical, pero por respeto o por ignorancia no lo hacía. Fue gracias a Emilio Fenoy (el otro violinista que participa en el espectáculo) que me pidió que escribiera “eso que acabas de tocar”. Le dije que era imposible ya que no lo recordaba, solo tenía dos opciones, o grabar mis improvisaciones o improvisar sobre el ordenador. Cierto es que cuando yo me senté a escribir en marzo de 2017 solamente tenía la idea de sorprender a mi amigo. El espectáculo fue tomando forma poco a poco, y sin darme cuenta, me sorprendió a mí y me vi involucrado en un proyecto que crecía progresivamente, a partir de ahí  fui incapaz de traicionarlo y dejarlo.

P. “¿Y por qué no? –le dije, aunque realmente me lo decía a mí.”

También escribes. Le pones texto y voz a tus composiciones. ¿Forma parte del sentido de este espectáculo?, trazar una línea de texto que acompañe y ayude a entender la obra al espectador o, ¿existe una necesidad de hacerlo, de verbalizar la música?

Q.M. Hablar sobre música no es lo que más me gusta, creo que es un arte para experimentarla y vivirla, pero cuando escribí estas composiciones pensé que debía introducir al oyente en su contexto porque son muy diferentes entre sí, así pues decidí incluir un breve texto que ayudara al espectador. No es una voz cantada, sino recitada.

P. Tienes ya una larga experiencia sobre los escenarios junto a otros músicos, pero esto es algo diferente. Aquí, no solo das el paso de dirigir sino que además debutas como compositor.

Q.M. Sí, (risas) me estoy reinterpretando. Creo que debemos hacer lo que sentimos y no privarnos de ello por motivos o excusas que siempre podríamos encontrar, yo no estudié composición…

P. Esta es tu primera experiencia al frente de un proyecto de estas características. La primera vez que diriges un espectáculo en el que unes varias disciplinas artísticas y en el que participan, al menos, siete personas entre instrumentos, bailarines, fotografía… Supongo que, en trabajos en los que colabora tanta gente, es difícil tenerlo todo bajo control.

Q.M. Sí, no pretendo tenerlo todo bajo control, hay que saber dejarse llevar por todos los colaboradores. Es cierto que yo planté la primera semilla pero el proyecto ha ido creciendo de forma inesperada desde sus inicios, empezando porque tuve que adaptar la parte de piano después de haber escrito las 10 primeras composiciones. También, por ejemplo, África Manso encargada de la danza, me pidió tener una pareja en el escenario… ¿Qué hago? Recurrir a “¿Y por qué no?…” Sin duda, todos los colaboradores han aportado su criterio, y  para que ellos se encuentren a gusto con su trabajo, necesitan libertad para crear lo que sienten, no pueden estar atados por un director… Creo que es el espíritu de Reinterprétate.

P. ¿Te ha costado dar el paso y mostrarte de esta manera: componiendo, escribiendo, dirigiendo, además de interpretar? ¿Hay algo de catarsis aquí?

Q.M. Siempre pensé que lo más difícil en composición es saber sobre qué escribir. Me propuse escribir sobre lo que conozco, lógicamente mis experiencias personales están reflejadas de una u otra forma en mis composiciones. Como además es una tarea que llevaba años pensando en realizar he aprovechado para decir a través de la música aquellas cosas que con palabras no he encontrado mi medio.

P. Utilizas la fotografía y la danza como elementos importantes. ¿Cómo crees que interfieren en la percepción del espectáculo por parte del espectador?

Q.M. Sin duda complementarán a la música, y aunque ambas se apoyan en el arte visual no se molestarán aún siendo simultáneas. Cada una  tiene unos tiempos diferentes, la danza es completamente dinámica pero la fotografía tiene un mensaje directo. Todos los actos van acompañados de fotografía pero no ocurre lo mismo con la danza, lógicamente los bailarines necesitan descansar.

P. Como vamos comentando, la fotografía es un punto clave de este espectáculo. ¿Cuánta libertad has tenido para escoger las imágenes? ¿Quico ha participado en esta elección, o lo ha dejado completamente en tus manos?

María Reig. Desde el principio Quico tuvo plena confianza en mí, quizá más que yo misma, por lo que siempre hubo libertad; “tú misma” me decía continuamente.

Él me ayudó a entender y profundizar más en cada una de las piezas, y a partir de ahí, me dejé llevar por aquello que a mí también me evocaba la música; tras una idea o varias desarrollaba un trabajo, y  siempre al final de cada pieza terminada lo revisábamos juntos, él sugería algún cambio, incluso aportaba muchas ideas, estaba entusiasmado.

P. ¿Qué criterio has seguido para escoger las fotografías que se proyectarán durante el espectáculo?

M.R. Las fotografías están pensadas para cada una de las piezas. Es un trabajo inédito de unas 270 fotos, solo 10 son de archivo.

Para cada número escribía un guión de imágenes basado principalmente en la estructura musical que previamente me explicaba Quico. Es decir, en las sesiones de fotos yo partía de la idea que queríamos transmitir, y disparaba el material que necesitaba. Por supuesto, hay muchos descartes, muchas ideas que no pudieron llevarse a cabo, etc.

P. Podríamos ver las fotografías y pensar que la música es una ilustración sonora de ellas, o disfrutar de la danza como centro del espectáculo. ¿Cómo has conseguido el equilibrio? ¿Dónde crees que está el secreto del equilibrio en Reinterprétate?

M.R. Existirá una convivencia entre la imagen y la danza unidas por la música. Pienso que el espectador hará un recorrido por los tres de una manera natural, y será absorbido por aquello con lo que conecte más según el momento.

También hay momentos que la imagen permite a la música y a la danza deleitarse juntas.

El secreto del equilibrio en Reinterprétate creo que está en la variedad, en la suma de los diferentes estados emocionales a los que nos lleva.

P. Una bailarina y un bailarín. La danza, como ya hemos hablado, es otro de los atractivos del espectáculo que estrenáis en breve. ¿Has querido participar en la realización de las coreografías?

Q.M. Lógicamente hemos tenido que contrastar ideas y llegar a puntos en común, pero igual que los bailarines han respetado mi música yo he respetado su buen hacer en la danza.

P. El cartel, (y el vídeo promocional) es obra de Miguel Ramal García. Es lo primero que podemos conocer del espectáculo y la primera impresión es muy buena. Cuéntanos cómo llega a manos de Miguel el encargo.

Q.M. Dado que en este espectáculo yo me encargué de la música y María Reig del aspecto visual delegué en ella la elección. Por tu impresión sé que acertamos los dos.

M.R. Para mí era muy importante el trabajo del diseño del cartel y así se lo transmití a Quico, debía de ser un buen trabajo. Entiendo que es lo primero que se ve del espectáculo, la primera referencia, debe ser sugerente y atraer el interés.

Conozco y admiro mucho el trabajo de Miguel, y le sugerí a Quico ofrecérselo a él, estaba segura de que haría un trabajo sorprendente.

Miguel Ramal. El cartel es una deconstrucción de módulos en el que el violín es el elemento principal. Realizo una mirada del icono en clave historicista, utilizo una tipografía romana acercándome al estilo clásico de la obra. Reinterpreté los elementos.

P. Vuestra primera parada es tu pueblo, Ibi. Entiendo que querías comenzar aquí. ¿Hay más destinos en la agenda?

Q.M. Sí, teníamos ilusión de estrenar en Ibi, es un público que nos conoce y nos alegra poder presentarles este nuevo proyecto. Tenemos intención de ir a Murcia, Almería, Alicante, para empezar…

P. A falta de las sensaciones del estreno, de la puesta de largo, de ver la reacción del público… ¿Te gustaría seguir esta nueva dirección que has tomado?

Q.M. Espero (esperamos María y yo) responder que sí después del estreno.

Por Octavio Ferrero