LA CASA DE JAMPOL

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La novia sefardí es un libro que tiene como protagonistas a judíos actuales afincados en Europa y que intentan conservar (muchos de ellos) antiguas tradiciones.

Aun juzgando el argumento interesante, confieso que no pasé de las primeras páginas. La autora, Eliette Abecassis, o quizá la persona que tradujo el texto original, repite demasiadas veces la misma palabra en párrafos cortos. Y yo tengo manía a las repeticiones que no conllevan una intención clara.

Sintiéndome un poco culpable por no terminar el libro, decidí buscar a otro autor que hubiese tratado en sus obras cuestiones similares.

El elegido fue Isaac B. Singer, escritor judío que nació en 1904 en Polonia, emigró a Estados Unidos en 1935 y allí murió en 1991.

Isaac B. Singer escribe casi toda su obra en yiddish, lengua hablada por las comunidades judías del centro de Europa, y los temas que trata están prácticamente siempre relacionados con el mundo judío: historia, tradiciones, fiestas, religión, persecuciones, etc.

La obra de Isaac Bashevis Singer que me permitió conocer un poco más la vida del que se llama así mismo “pueblo elegido” fue La casa de Jampol, que nos cuenta la historia de una familia de judíos polacos residentes en el pequeño pueblo de Jampol a mediados del siglo XIX, cuando la última rebelión de los polacos contra el imperio zarista ha sido aplastada a sangre y fuego.

En esa situación, el comerciante judío Calman Jacobey pone en marcha negocios que traerán a su casa una gran prosperidad económica, hasta el punto de que alquila la mansión del conde Wladislaw Jampolski, aristócrata condenado al exilio y con sus propiedades confiscadas por participar en la rebelión contra el zar.

Calman Jacobey, judío asideo y, por tanto, fervoroso creyente, que intenta, pese a los cambios que experimenta su vida personal y familiar, ser fiel en todo momento a sus creencias, es el principal personaje de esta extensa novela (514 páginas). A su alrededor, giran todos los demás: dos esposas, cuatro hijas y sus respectivas parejas, amigos, parientes, contactos comerciales, etc. en un espléndido mosaico que sirve para que conozcamos, junto al desarrollo de dicha familia y sus vicisitudes, la evolución general de la sociedad polaca durante la segunda mitad del siglo XIX, en tránsito hacia la revolución industrial, influenciada por la aparición de corrientes de igual modo revolucionarias, como son el nacionalismo y el socialismo, y oprimida por sus poderosos vecinos.

Es un libro enormemente didáctico y realista, cuya lectura, ágil y amena, aporta al lector una gran cantidad de documentación, que ayuda a profundizar en el conocimiento del mundo judío y su apasionante y trágica historia.

Henry Miller, el afamado autor de los «Trópicos«, fue un admirador ferviente de Isaac B. Singer, al que acostumbra a referirse en términos entusiastas.

Mientras leía La casa de Jampol, pese a que me hubiese gustado saber cómo terminan las historias de algunos personajes (soy así de prosaica), iba entendiendo las causas de esta admiración tan profunda.

1 Comentario

  1. Pues si quieres saber como acaban las historias de los personajes puedes leer 'los herederos', del mismo autor, que es la continuación. A mi me ha gustado más 'los herederos' que 'la casa de Jampol'. No sabía que había segunda parte y me lleno de alegría, me dijo lo mi marido y no pare hasta encontrarla y leerla seguido de la otra. Saludos.

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