Por Mª José Alés
El pasado día 10 de diciembre nos reunimos los miembros del jurado encargados de valorar y evaluar los muchos relatos ilustrados que, desde diversos lugares de España e Hispanoamérica, se presentaron a la V edición del Premio Opticks Plumier de Relato Ilustrado.
La intención era comer todos juntos y, en la sobremesa, deliberar sobre el contenido de los relatos y sobre las ilustraciones que creíamos merecedoras del premio de 700 euros (a repartir entre el ilustrador y el escritor) que otorga la revista Opticks Magazine junto a la librería Plumier.
No todos los miembros del jurado nos conocíamos; la comida debía servir para cambiar impresiones e iniciar un conocimiento que nos permitiera, a posteriori, plantear las particulares estrategias cuando llegase la hora de defender lo elegido.
Como todo lo que rodea a Opticks es mágico, las estrategias no fueron necesarias. Personas diferentes, algunas con amplia experiencia y reconocimiento en su campo, como Miguel Calatalyud, Vicente Ferrero o Ricardo Bellveser, junto al resto de miembros del jurado: Luis Casado Ramos, Octavio Ferrero Punzano, José Antonio García Iváñez, Rosendo Martínez Soler y Mª José Alés, no tan reconocidos, pero igual de entusiastas, tras la comida y el consiguiente café, analizamos con total sencillez y naturalidad cada uno de los relatos y las ilustraciones que llevábamos seleccionadas. Facilitaron nuestra labor los artilugios que trae consigo el avance de la tecnología.
Imagino la sorpresa de algún que otro cliente del restaurante (el personal ya estaba advertido) cuando vio aparecer en la mesa del lugar que nos habían asignado varias “tablets” alrededor de las cuales gesticulaban animadas ocho personas.
Una por una por una se visionaron las ilustraciones que acompañaban a los once relatos finalistas, cuyos títulos eran: 1. Los habitantes del patio; 2. Sábanas de papel; 3. Aventura al mundo del color; 4. El lugar más empalagoso del planeta; 5. Devociones; 6. Cambio climático; 7. Espelta matutina; 8. Caída libre; 9. Amores velados; 10. Melómano; 11. El poeta pensado.
Está claro que en este apartado las opiniones de los dos expertos: Miguel Calatayud y Vicente Ferrero fueron determinantes. Ellos nos explicaron lo que valoraban en las ilustraciones elegidas y, como es lógico, sus argumentos resultaron la mal de convincentes.
Después llegó el momento de valorar los textos literarios, teniendo en cuenta su originalidad, la corrección al expresarse y todo aquello que cada uno de nosotros consideraba sobresaliente en los relatos que consideraba mejores.
Ricardo Bellveser, con su habitual espontaneidad y maestría, leyó en voz alta párrafos de los que más puntos sumaban del conjunto y, aunque también aquí la discusión estuvo animada, esa prueba final nos impulsó a ponernos de acuerdo, eligiendo por unanimidad para que le fuese otorgado el premio de 700 euros, diploma y publicación en el nº 14 de Opticks Magazine al relato titulado Sábanas de papel, escrito por Juana Espín Cánovas e ilustrado por Jaume Marco Moncho.
El segundo premio, que obtiene diploma y publicación en la actual revista, fue para El lugar más empalagoso del planeta del escritor Demian Rugna, ilustrado por Laura Aguerredehere.
Coincidimos también en otorgar una mención especial a los relatos titulados Los habitantes del patio y Amores velados.
Nuestro encuentro terminó con el propósito de repetirlo en cuantas ocasiones se presentaran para ello. Algunos de los presentes más veteranos en esta clase de eventos estaban sorprendidos del ambiente creado y de la forma en que se había desarrollado todo.
Ahora ya cuentan con otra razón más para no sonreír si nos escuchan calificar de milagro y de mágica a la revista Opticks Magazine.
Publicación : 21 de diciembre de 2013
